viernes, 20 de septiembre de 2013

Algo que venía pensando + Algo que leí

El problema fue la primera pregunta.
La curiosidad, ¿Habrá algo más? ¿Qué es esto?
Eso hizo del mono una persona.
Inevitablemente cuando pienso en curiosidad, se me viene a la cabeza la palabra inquietud, y estas dos palabras van de la mano con la juventud. El joven siempre quiso trascender las normas, romper las reglas y exponer que ellas son lógicas para muy pocos, por lo tanto, poco representativas.
Cuando digo que el problema fue la pregunta, digo también que por esa pregunta, vivimos como vivimos.
Ahí apareció el mecanismo lógico de cuadrados dentro de cuadrados para mecanizar y optimizar las cosas.
Eso. Eso es lo que me desespera: mecanizar y optimizar.
Vienen con el cuento que somos distintos a los animales porque podemos pensar. ¿Qué es pensar? ¿Por qué siempre se trata de costo-beneficio? Esa idea me hace mucho ruido, me hace pensar en lo individual. ¿Qué gano? ¿Qué pierdo? Y no, viejo.
Y aún peor, nos tragamos el cuento. ¡Y ADEMÁS LO REPRODUCIMOS!
El joven hace todo para escaparle al EFE. ¿Qué hace el EFE? encausa su rebeldía en un nuevo producto que sale mañana al mercado, todo muy barato y con grandes descuentos.

No. Disiento con los que dicen que la juventud está perdida o que es una generación perdida o alguna pelotudes por el estilo. Aunque hay algo que los enajena un poco, no los culpo. Es otra vez esa forma de huirle a la norma, pero también siento que es otra causa enjaulada por el EFE.
Me cuesta tanto no verlo todo ahí, es difícil encontrar cosas fuera de él. Pero existen, y hay que ir a por ellas.
A veces pienso que quizás lo que tenemos que buscar es que: el escape se vuelva norma. Y luego volver a romper con esta norma para darle un nuevo sentido a esta cosa.

Una vez una vieja con cara de nada dijo "Nada se puede construir sin amor" y yo la saco de contexto para que tome algún sentido lo que dijo la vieja que hablaba por hablar. Che, vieja. ¡Tenes razón!